RESEÑA: "MÓNECHKA", MARINA PALEI
Fuente: @undine.von.reinecke Instagram |
Ficha técnica:
Editorial: Automática Editorial
Traductora: Marta Sánchez Nieves
ISBN: 978-84-15509-32-5
Encuadernación: Cosido
Formato: Rústica con solapas
Fecha de publicación: 03/05/2016
Número de páginas: 106
Traducido por: Marta Sánchez-Nieves
PVP: 14.00€
Sinopsis de la Editorial:
Desde la adolescencia, Mónechka siempre mostró un
inigualable talento para disfrutar de los placeres mundanos; esta precoz
habilidad, que alcanzaba las más altas cotas en su relación con los hombres,
marcó desde el principio el rumbo de su existencia. Monka se arrojó a la vida a
pecho descubierto, y esta la acogió en un torbellino de excesos y pasiones que
la llevarían a transitar por igual las sendas de la felicidad y del dolor.
Marina Palei ha creado un personaje difícil de olvidar que, como una moderna
Cabiria recién salida de la película de Fellini, está dispuesta a seducir al
mundo entero, con total despreocupación por las convenciones sociales o morales
y que es capaz de sobreponerse a cualquier desgracia aferrándose tan solo a
algún diminuto atisbo de esperanza.
Primera propuesta musical para el libro:
La muñeca enferma, Tchaikovsky
Intérprete: Valentina Lisitsa
Lo que Undine piensa del libro:
Fuente: Amazon.es |
Cuando era pequeña no me gustaba leer. No entendía cómo
otros niños de mi edad ocupaban su tiempo con libros en vez de correr y jugar al
escondite u otros juegos en los que la descarga de adrenalina te hiciera sentir
vivo. Sería más o menos con once o doce años cuando mi grupo de amigas, todas
lectoras empedernidas, consiguieron picarme con el gusanillo de la curiosidad
al sentirme excluida del tema de conversación que ocupó a la pandilla durante muchas
semanas. Se trataba de un libro, La vida sale al encuentro, de Martín Vigil, y ese ejemplar fue viajando de casa en casa,
siendo reclamado con premura por la siguiente lectora. Fue entonces
cuando me pregunté si no me estaría perdiendo algo, y quise incluirme en el
círculo de lectoras; esa fue la primera ocasión en que sentí la emoción al leer
y dejarme seducir por un personaje que me rompió el corazón, Cheché; ese fue también el comienzo de mi historia de
amor por los libros.
Desde aquellos días hasta ahora muchos han sido los
personajes de novela, protagonistas o secundarios, que han pasado por mi vida subyugándome,
enriqueciendo mis días y, que de alguna manera, ya forman parte de mi persona.
Hoy os voy a hablar de la última incorporación a mi galería de personajes
ficticios favoritos, Mónechka, protagonista de la novela homónima escrita por la autora
rusa Marina Palei, por quien siento ya
verdadera adoración.
Cartel de Las noches de Cabiria (Fellini) Fuente: Fundazione Federico Fellini |
Mónechka, también conocida como La Cabiria de Leningrado o
La Cabiria del canal Obvodnyi (como también la he encontrado nombrada), hace
una clara referencia al personaje de la
película Las noches de Cabiria (1957), del cineasta italiano Federico Fellini.
Para quienes no conozcan la película, pocos deben ser, os contaré quién era
Cabiria:
< Cabiria, inocente e indefensa, es una prostituta con una existencia infeliz. Ha corrido el riesgo de ser asesinada por un amigo por su dinero; un célebre actor se burla de ella e incluso sus compañeras de la calle se divierten a sus espaldas. Desconsolada, acude al santuario del Divino Amor y, atrapada por el énfasis de una ceremonia religiosa, reza ella también para que un milagro le haga cambiar de vida. Y parece que el milagro se cumple; después de que un ilusionista le ha predicho un futuro feliz, Cabiria encuentra a Oscar, que le declara su amor y ella, como contrapartida, le confía sus ahorros. Pero Oscar está interesado solo en su dinero e intenta incluso asesinarla. Cabiria consigue salvarse una vez más y se da cuenta de que su ingenuidad le complica la vida. Desesperada, vaga por un bosque, de noche, donde encuentra un grupo de jóvenes alegres y felices. Y Cabiria encuentra su sonrisa, deja de llorar, lista para volver a emprender su camino. >Fuente: Fondazione Federico Fellini
Tras haber leído la sinopsis de la película, o si habéis
visto la película y conocéis el personaje, podéis haceros una idea de cómo
Marina Palei quería disponer al lector emocionalmente para presentar a su protagonista,
no pretende llevarle a engaños, ésta no va a ser una historia feliz.
Giuletta Masina como Cabiria Fuente: Wikipedia |
Pero, no penséis que Mónechka es una copia de Cabiria, nada
de eso. Mónechka es un arquetipo de persona, de mujer que busca el amor y la
atención desaforadamente sin controlar sus instintos. Un paradigma que existe en todas partes y que
la autora lleva a tierras eslavas, dándole personalidad propia e iconografía
rusa. Leamos cómo la presenta al inicio del libro:
< Cuando no había cerca hombres o voces de hombres u olor a hombre, se sentaba indolente y, con las rodillas relajadas, se hurgaba las uñas.Se llamaba Raimonda Rybnaia, pero lo habitual era llamarla Monka, Mónechka. El apellido lo había recibido de su marido, el nombre se lo debía a su madre y tía mía: Guertruda Boríssovna Fáikina. >
Un comienzo feroz que no deja lugar a dudas sobre el
carácter de nuestra protagonista. Marina Palei lo irá contando todo a través de
una narradora omnisciente, la prima de Mónechka, diez años más joven que ella,
quién será testigo y conciencia de su azarosa vida, dando cuenta al lector en
todo momento de quién es Mónechka, pero sin dejar de quererla y admirarla pese
a todo, por sus ganas de vivir que superan a las de cualquier mortal:
< Hay una foto. Estamos Monka con catorce años y yo, por tanto, con cuatro. Aparecemos junto a un abeto nevado en casa de los abuelos. Monka es de frente ancha, con hoyuelos en las mejillas, y sus ojos son abiertamente pícaros, mejor dicho, sus ojos son ya completamente obscenos. Yo le llego por la cintura, tengo mirada rigurosa, y me doy un aire a una viejecita sabia, severa e inflexible. >
La historia empieza presentando a la madre de la
protagonista, un ser egoísta y fantasioso, incapaz de dar amor verdadero y
acaparadora de la atención de todos. Ella, Guertruda Boríssovna Fáikina será,
en mi opinión, tan protagonista como la propia Mónechka de esta historia,
porque sin su participación, quizá este libro se hubiera escrito de otro modo.
El padre un tullido a causa de la guerra, bruto y sin razón, impone su criterio
a base de cinturón. Mónechka tiene un hermano mayor que ella, con quién la
madre hace de alcahueta no sirviéndole cualquier mujer para él.
Desde muy niña, Mónechka ha tenido querencia a la felicidad,
una dicha que buscaba fuera del hogar, pues dentro no la había. Su deseo de
atención, cariño, amor no es satisfecho, y corre a la calle a buscarlo en
cualquier parte y de cualquier manera. En casa le espera la paliza del padre,
quién a golpes quiere curar esa enfermedad, que la madre trata de locura y el
padre de lujuria animal:
< - A las que son como Raimonda habría que llevarlas a un museo, a ese… ¿cómo se llama? ¡al Kunstkámera, eso!- ¡Hay que llevarla a un loquero, a una clínica! (…)- ¡No! Ya sé lo que hay que hacer –se calentaba Arnold Arónovich-. ¡Hacedme caso por una vez! ¡Al menos por una vez! Hay que llevarla a…hay que coserle ¿cómo se llama eso…? ¡Joder! Lo que cosen a los gatos… >
Fuente: Pinterest.es |
Mónechka no tiene malicia, ella se enamora, o eso cree, y
agasaja a todo aquel que le preste atención. Ni vigilancias de su hermano
policía, ni puertas y ventanas atrancadas conseguirán encerrar las ganas de
Monechka, que se juntará con todo tipo de individuos que obtendrán mucho más de
ella de lo que ellos dan.
Evidentemente, sus ardientes inquietudes interiores, si se
las puede llamar así, no congenian con los estudios y la vida normal de una
adolescente, y los padres, intentando hacer carrera de ella, la ponen a
trabajar en una cafetería. Este lugar le ofrecerá una gama amplia de
entretenimientos sin par, que vienen a empeorar el problema: alcohol, tabaco y
hombres serán la medicina que Mónechka aplicará a su corazón enfermo, porque
ella, nuestra protagonista tiene muy mala salud; alma y cuerpo enfermos, como
una heroína de ópera romántica, una Mimí en la Rusia de las postrimerías del S.
XX.
Venus de Katsap, M. Larionov Fuente: Blog Desdeelotroladodelcuadro |
Siendo aún muy joven, y no habiendo cambiado en nada la
situación familiar y personal de Mónechka, decide casarse y disfrutar del sexo
aceptado, del marital:
< En el jardín de ese paraíso crecía un Árbol.Los libros que Monka no leía lo nombraban de diferentes formas: Báculo de la Vida, Raíz de la Pasión. Rama de Coral, Fiera, Diablo, Gorrioncillo, Serpiente Nocturna, Víbora de los Calzoncillos e incluso Daga Quebrantavírgenes, dependiendo del temperamento y de los principios estéticos del pueblo al que perteneciera el autor (…) >
Pero, con el tiempo y
la rutina, descubre que se ha unido a un
hombre tan bruto o más que su padre, el cual busca satisfacer sus apetitos
entre las vecinas amigas de Mónechka.
Ella, siempre optimista y vivaz pese a
todo, comienza a buscar una vez más fuera de casa amor y felicidad, bailes y
risas. De bar en bar, de fiesta en fiesta; ni la maternidad ni la falta de
salud harán que ella cese en esa búsqueda que nunca parará, y la irá llevando
de hombre en hombre sin que nada cambie ni mejore. ¿O quizá sí? Será la prima
de Mónechka, la ya mencionada narradora y conciencia del libro, quien nos ayude
a conocer la verdad que esconde esta historia.
Fuente: Automática Editorial |
Si os digo la verdad, nunca pensé que pudiera sentir tanta
afinidad por este relato. Al comenzar su lectura me dejé llevar por el ácido
humor y la amarga ironía que sus primeros pasajes presentan, desde la frialdad
del espectador que cree conocer el final. La narrativa inteligente y muy culta
de Marina Palei, me inducían a seguir leyendo, devorando una novela que
aparentemente distaba por temática y procedencia de mis gustos lectores, para
finalmente caer rendida a los pies de una escritora que ha conseguido hacer de
mí su devota admiradora. ¿Cómo lo ha hecho? Me ha hechizado con astucia. Su
prosa, heredera de los más altos legados del alma rusa, está tocada con el
encanto de la lírica eslava, la herencia ortodoxa, la música de los campesinos
y el orgullo de la Rusia antigua. Costumbre, religión, matrimonio y política un
amasijo de creencias y reglas que resumen el carácter de una nación en la
segunda mitad del siglo XX, y que la autora pone en tela de juicio sin dar
opinión alguna, dejando al lector que saque conclusiones.
Una narrativa original y poética, con pasajes tan bellos como
despiadados, que sorprenden al lector y le involucran en una historia que sería
digna de ser adaptada como libreto operístico posmoderno.
La autora construye una historia que se sostiene gracias a
unos cimientos sólidos que son sus personajes, dotados todos ellos de gran
fuerza pese a ser descritos tan solo en tres líneas geniales, suficientes para
conocerlos enteramente.
Como si del cuadro de
Los borrachos de Velázquez se tratara, la escena que el lector contempla es tan
explícita que basta para comprender todo
cuanto en el libro nos es contado. En todo momento siente y padece el dolor, la
pena y compasión que la narradora trasmite. Porque, es ella quien tiene la
objetividad que comparte con el lector: La vida y la muerte narrada por un
orador objetivo y responsable.
Mónechka es una historia real. No, no me refiero a que los
acontecimientos aquí narrados hayan sucedido en la cronología que se nos
cuentan, ni que Mónechka y sus familiares y amigos formen parte del censo de la
antigua URSS. Mónechka es la historia de muchos seres indefensos y vulnerables
que, velados por sus instintos, crecen sin el consejo y el amparo de quienes
debieran ser sus mayores protectores, los padres o el Estado en su caso. Y así,
como una planta debe ser mimada desde que germina, regada e incluso enderezada
si tiende a torcerse, las personas necesitamos educación, consejo, amor y atención para formarnos una
conciencia interior que nos ayude a tomar decisiones adecuadas y nos proteja de
la vida. La ignorancia, la superstición y el egoísmo de una sociedad sin
valores son el cáncer que extermina cuanto de humano
tiene el individuo.
Pese a todo, Mónechka es un canto de optimismo, su
personaje, una muñeca rota alocada y carnal, goza de un don, la esperanza, que
le es otorgado por Marina Palei y que la convierte pese a todos sus defectos en
una de las antiheroínas más carismáticas de la literatura contemporánea, y que
hace ley y defiende la famosa máxima de grandísimo Séneca:
< El colmo de la infelicidad es temer algo, cuando ya nada se espera. >
Una propuesta lectora diferente y enriquecedora, de esas que
están fuera del circuito frecuente de lecturas, que me fue recomendado en la
FLM 2019 por Darío Ochoa de Chinchetru, editor de Automática Editorial, a quien
conocí personalmente en la Feria, y a quien agradezco esta maravillosa e
interesante recomendación, que me ha abierto la puerta a un universo nuevo que
promete grandes viajes literarios en compañía de Marina Palei.
Segunda recomendación musical para el libro:
La autora por la editorial:
Marina Palei (Leningrado, 1955), es una destacada escritora
y periodista. Su estilo extravagante y ecléctico que combina elementos modernos
y posmodernos, le ha valido el respeto de la crítica así como el amor y la
fidelidad de los lectores. Tras graduarse en Medicina y ejercer la profesión
durante unos años, Palei empezó a involucrarse en círculos teatrales y a
escribir poesía. Poco después comienza a estudiar en el Instituto de Literatura
Maksim Gorki, del que se graduaría en 1991. Marina Palei experimenta desde entonces
con todos los géneros literarios. Entre sus obras destacan: Mónechka (La
Cabiria de Leningrado), El coro, Lunch, Klemens, Zhora Zhirniago y Tributo a la
Salamandra.
Para serte sincera no había oído hablar de este libro ni de la autora, pero pinta bien.
ResponderEliminarBesos
Buenas tardes:
EliminarEs todo un descubrimiento la autora, y el libro una lectura muy diferente. Sorprendente!!
Un abrazo, y gracias por comentar!!
Hola,
ResponderEliminarMe has sorprendido con esta reseña y este libro. Me lo llevo anotado. Gracias
¡Muchas gracias!
EliminarSi lo ees, espero que lo disfrutes, y pases a comentarme tu opinión del libro.
Un abrazo, y muchas gracias otra vez!!
Hola preciosa!
ResponderEliminarYo también empece a leer con once o doce años, aunque por aquel entonces lo que más me gustaba eran los tebeos, me encantaba Zipi y Zape o Mortadelo y filemon no fue hasta unos años más tarde cuando por obligación empece a leer los clásicos y termine enamorada de la mayoría de ellos. En cuanto al libro la verdad es que no sabía de el y bueno no se si me animaría a darle una oportunidad.
❀ Fantasy Violet ❀
Besotes! 💋💋
Buenas tardes, Violeta:
EliminarLa verdad, es una lectura que se aleja del círculo acostumbrado de títulos. Yo estoy feliz de haber dado con él, y más aún, con esta autora. Estoy deseando leer el otro libro que tiene editado por Automática. Ya os contaré.
Un abrazo, y gracias por comentar!!
Yo empecé como lectora un poco más tarde con El camino, de Delibes.
ResponderEliminarEsta historia es muy cruda aunque los rusos tienen una forma muy especial de contar las tragedias, son muy fuertes en realidad. Por lo demás el libro me gusta, sobre todo el personaje y la historia es muy completa. Pero ahora prefiero el final feliz así que me la guardo para más adelante.
Muy buen trabajo.
Besos
Buenas tardes, Norah:
Eliminar¡Lo has clavado! Has cogido perfectamente el espíritu del libro.
Entiendo lo que dices con respecto a leer en positivo, no obstante, no te olvides de Mónechka, te encantará en su momento justo :)
Un abrazo, y muchas gracias por leerme, y comentar!!
Maravillosa reseña!! Felicitaciones !
ResponderEliminar¡Muchas gracias!
EliminarUn abrazo.
Cómo me gusta leerte Undine, tomo nota que tiene una pinta buenísima!!!
ResponderEliminarBesotes
Muchísimas gracias!!
EliminarMe hacen mucha ilusión tus palabras!! Y sí, es una lectura muy diferente, y pese a que el argumento resulte algo grotesco, no te deja mal sabor.
Un abrazo grande!!
Hola Undine!! Vaya descubrimiento me haces con este título y de la editorial, tomo buena nota de tu recomendación. ¡Genial reseña! Besos!!
ResponderEliminarBuennos días:
EliminarSí, Mónechka es fantástica, y la editorial tiene una selección de títulos francamente seductores. Te recomiendo ambos encarecidamente.
Muchas gracias por tu comentario!!
Uy, pues nuestro comienzo con la lectura fue totalmente distinto. Mi madre me la inculcó casi desde la cuna, no recuerdo mi vida sin un libro en las manos :) Sobre este libro, lo conocía por la portada, porque me encanta, y de hecho lleva en mi wishlist mucho tiempo (como tantos otros libros), pero con esa portada no esperaba el tipo de historia que cuentas, esperaba algo más... no sé, distante. Ahora tengo más ganas todavía de leerlo, huelga decirlo. Qué bonito es cuando empatizamos tanto con un personaje, ¿verdad?
ResponderEliminar¡Besote!
Pd. Esta mañana me he comprado el libro de Perutz que me recomendaste, "El maestro del juicio final". Me muero por leerlo, ya te contaré cuando le saque hueco :)
Buenos días, Inquilina:
EliminarA mí me lo inculcaron desde pequeña, pero yo no me dejé seducir por mi familia, ya ves, que fueron mis amigas las que me despertaron el gusanillo lector.
¡Qué bien que te hayas comprado El maestro del juicio final! Es una novela diferente y magnética. Estoy deseando conocer tu opinión.
Por cierto, no dejes de leer Mónechka, sé que te encantará :)
Un beso grande!!
Hola!! Me encanta leer tus reseñas! Siempre me picas con la novela!!! Besos!!!
ResponderEliminarMuchas gracia por tus palabras, Jani!!
EliminarSi tienes oportunidad de leer la novela, estaría encantada de conocer tu opinión. Ya me contarás.
Un besote!!
Hola.
ResponderEliminarNo conocía este libro ni a su autora pero con tu estupenda reseña me has picado la curiosidad y me lo anoto para buscarlo en la biblioteca.
Un saludo.
Buenos días:
EliminarNo es una lectura de las que se encuentran frecuentemente en las librerías a primera vista, a mí me la recomendó el editor. Si tienes oportunidad, no dejes de leerla, no te arrepentirás.
Un abrazo!!
Oye pues qué bien te hicieron esas amigas, ahora eres toda una disfrutona de la lectura ;)
ResponderEliminarEste libro lo tenía ya fichado de insta, pero tú reseña me ha vuelto a picar (qué raro). Y es que su protagonista paree de esas que se quedan en la memoria del lector por sus peculiaridades.
No me la quiero perder, la anoto ;)
Besitos
Buenos días, Cris:
EliminarMis amigas fueron una gran influencia, creo que jamás las olvidaré, pese a que la vida nos separó a los 18 años.
En cuanto al libro, no dejes de echarle un ojo, es una lectura francamente interesante.
Un beso, preciosa, y muchas gracias por comentar!!
¡Hola!
ResponderEliminarQue curioso lo que cuentas de tu inicio lector. En mi entorno nunca hubo nadie que se interesara por la lectura y cuando les pregunto a otras personas, pues tampoco. Pero creo que este tipo de anécdotas nos ayudan a sacar la cabeza del hueco y notar que no en todas partes sucede lo mismo.
En cuanto al libro, no lo conocía y aunque me llama la atención no sé si estoy en épocas de lograr disfrutarlo como se merece.
Me lo llevo apuntado por si lo veo por ahí.
Muchas gracias por tu opinión.
Besos <3
Buenos días:
EliminarEn mi entorno leía todo el mundo, era yo la que tenía otras preferencias. Tuve que darme cuenta por mí misma de lo que me estaba perdiendo, que el deporte y otras aficiones no eran incompatibles con los libros. En mi opinión, cada lector tiene su momento de lucidez y descubrimiento. No importa cómo, ni cuando, sino finalmente llegar a los libros. Aunque, evidentemente, la sociedad debería cuidar más el acceso a la cultura.
Muchísimas gracias por comentar, eres muy bienvenida!!
Hola! Muy buena reseña! Me lo apunto en la lista interminable de lecturas pendientes! Soy nueva por aquí y ya te sigo!
ResponderEliminarDejo el enlace a mi blog por si te apetece hacerme una visita
https://misgrandespasiones-rosa.blogspot.com/
Nos leemos! Bss!
¡Muchas gracias por tus palabras!
EliminarEncantada de tenerte por aquí, y sin duda pasaré a leerte en su blog.
Un abrazo.