RESEÑA: "UNA HISTORIA CREPUSCULAR", STEFAN ZWEIG

Fuente: Undine von Reinecke

Ficha Técnica:

COLECCIÓN: Cuadernos del Acantilado, 69

TEMAS: Narrativa y Relato

AUTOR: Stefan Zweig

TRADUCTOR: Joan Fontcuberta

ISBN: 978-84-16011-68-1

EDICIÓN: 2ª

ENCUADERNACIÓN: Rústica cosida

FORMATO: 11,5 x 18 cm

PÁGINAS: 64

 

 

Sinopsis de la Editorial:

Bob, un adolescente inglés de familia acomodada, pasa el verano en la campiña escocesa. Una noche, mientras da un paseo por el jardín, vive un breve encuentro amoroso con una enigmática joven que termina esfumándose antes de que él consiga saber quién es. Exaltado por la intensidad de unos sentimientos desconocidos e inimaginables hasta entonces, se propone desvelar la identidad de la muchacha. Un relato íntimo y evocador que narra el periplo hacia la madurez de un joven que, en el ocaso de su infancia, descubre las emociones y la complejidad del amor adulto.

Propuesta musical para este libro:

Fritz Kreisler plays Kreisler "Liebesleid"

(Para ti)

 

Lo que Undine piensa del libro:

Hay un mundo sensorial dentro de cada uno de nosotros que tiene vida propia, y, aunque muchos no lo perciban, está ahí, esperando a que los hados del  destino lo despierten de su letargo. Pocos son los individuos capaces de sentir a lo largo de la vida su aliento mágico, pero aquellos privilegiados que lo consigan disfrutarán de una vida singular, para bien y para mal. Es común que entre estas personas identifiquemos a los artistas, capaces de inundar nuestro mundo emocional con su genio creativo. A ellos, todas las musas les concedieron la capacidad de de hacer vibrar una emoción... Aunque si de emociones se trata, un tema tan particular como subjetivo, los espíritus creativos no son los únicos capaces de agitarse frente determinada situación. Por poner un ejemplo y para hacerme entender, ¿no os ha ocurrido alguna vez que tras una tormenta estival el olor a tierra mojada y la esencia que emana de las plantas ha activado vuestras facultades sensoriales, de tal modo que habéis revivido con pasión algún recuerdo especial de vuestras vidas?  Si es así, querido lector, estate muy atento porque el relato que reseño hoy lo escribió especialmente para ti Stefan Zweig.

Imaginemos uno de esos días del verano cuando el calor de la jornada comienza a declinar. Ese mágico y bello momento del día cuando el sol y la tierra se unen en el horizonte conocido popularmente como “la hora azul”. Un instante frecuentemente elegido por poetas y pintores para inmortalizar miles de leyendas románticas. En ese magnético resquicio de tiempo sitúa Zweig Una historia crepuscular que comienza así:

< ¿Ha sido el viento lo que ha traído de nuevo la lluvia a la ciudad haciendo que nuestra habitación se oscurezca de pronto? No. La atmósfera está tranquila y tiene una claridad argentada, como raras veces ocurre en estos días de verano, pero se ha hecho tarde y no nos hemos dado cuenta. Sólo los tragaluces de enfrente sonríen todavía con un débil resplandor y por encima de los tejados el cielo se cubre ya de una bruma dorada. En una hora será de noche. Una hora maravillosa, pues nada es más bello que ese color que poco a poco se marchita y se ensombrece, y luego la oscuridad, que brotará del suelo, invadirá la estancia, hasta que sus negras olas se despliegue en silencio sobre las paredes y nos arrastren a las tinieblas. Entonces, cuando en este momento nos sentemos uno frente al otro y nos miremos sin hablar, nos parecerá que el rostro familiar que entra en las sombras se ha vuelto más viejo, extraño y lejano, como si nunca lo hubiéramos conocido y lo contempláramos a distancia y a través de muchos años. Pero ahora quieres que hablemos, porque en el silencio oyes acongojado cómo el reloj rompe el tiempo en cien pequeñas astillas y la respiración se vuelve ruidosa como la de un enfermo. Quieres que te cuente algo. Con mucho gusto. (…)>

¡Nadie como Stefan Zweig para describir cualquier sensación! ¿No es cierto?

El autor ha conseguido en este caso crear una brecha en el tiempo para dibujar la atmósfera deseada y con ello captar la atención del lector. Y así, sin más dilación, comienza el narrador su historia. Una anécdota que dice haber escuchado a un antiguo conocido con quien se cruzó en un viaje, distanciándose de este modo de cualquier especulación autobiográfica, ¿o quizás no?

Nos remontamos a la época juvenil del protagonista. Bob es un adolescente que pasa sus vacaciones de verano junto a su hermana, algunos familiares y amigos en un castillo de la legendaria Escocia. Sus días transcurren todos iguales entre cacerías, paseos a caballo y las cansinas tertulias tras las comidas. El muchacho se siente desubicado en ese contexto, no encaja.  Sus dieciséis años le hacen sentirse lo suficientemente mayor para poder optar al mundo adulto, pero su falta de mundo y experiencia no le hacen atractivo a las jóvenes que veranean junto a él, aunque hasta hace poco tiempo eran sus compañeras de juegos.

Glamis Castle
Fuente: Kalaboo.com

Una noche en la que Bob no se siente inclinado a departir con el resto de habitantes del castillo tras los licores de la cena, decide salir a los jardines de la propiedad para pasear en soledad. La oscuridad escocesa le envuelve con sus misterios: Las sombras de los árboles le abrazan, los susurros de las aves nocturnas le sobrecogen, sus propios miedos y pensamientos le invaden. Cuando de pronto una sombra con esencia de mujer le abraza, le acaricia, le hace perder el sentido hasta el más sublime éxtasis sensual. El encuentro dura tan sólo unos minutos o quizá más, Bob no lo sabe, porque todo ha sido tan mágico e inesperado que la frontera entre sueño y realidad no está bien definida en su percepción. Pero no importa, porque la emoción es indiscutible a la par que novedosa: Él siente que ha vivido un auténtico encuentro de amor entre hombre y mujer. Decide acostarse y descubrir a la mañana siguiente quién de entre sus bellas compañeras de vacaciones puede ser su amante anónima. Porque Bob tiene claro que esa aparición tiene nombre y es conocido.

Cuando se despierta por la mañana, algo nuevo  crece dentro de él, ¿podrá llamarse amor? Excitado, pone todos sus sentidos a trabajar para hallar a su misteriosa amante. Pero nada parece indicar que entre ellas se encuentre la dulce figura con quien compartió su primera experiencia de amor. Inquieto ante la incertidumbre, decide aventurarse otra vez  en los jardines  al anochecer para esperarla sin la seguridad de que ella vaya a aparecer. La espera se hace larga pero al fin ella llega y le sorprende con otro apasionado encuentro. Entre abrazos y caricias él intenta verle el rostro, pero la noche juega a favor del anonimato con sus sombras e impide que pueda identificarla. Tan sólo ha podido llevarse una prueba de ese apasionado momento: la señal en forma de sello que la pulsera de la muchacha ha dejado en el brazo de Bob.

Con esta prueba y las emociones que la joven ha despertado en él construye una imagen idealizada de su amante en la sombra, a la que intentará por todos los medios descubrir a la luz del día. Pero su labor no será nada fácil, porque sus sospechas le confundirán y le llevarán a idealizar sus sentimientos de tal modo, que le dificultará hallar a su verdadero amor.

¿Será capaz de encontrarlo?

Una historia crepuscular es una bellísima reflexión filosófica sobre los primeros impulsos sensuales. Una maravillosa y platónica meditación sobre la repercusión en la vida del primer amor y la intensidad emocional de su recuerdo.

< ¡Cómo había envidiado a todos los que eran o parecían serenos, tan equilibrados y desprovisto de cualquier deseo! Él había tenido miedo de su pasión naciente como de una enfermedad.>

Es un brillante relato cargado de misterio y magnetismo sensorial. Un bello cuento de emoción juvenil y pasión abrasadora que lleva al lector a reencontrarse con su yo más auténtico: Ese individuo virginal y hábil en generar los más bellos sentimientos en su primera experiencia de amor; un ser anulado por el paso del tiempo y la experiencia, incapaz ya de igualar aquella inocente e idealizada pasión.

< ¿O estás triste a causa del muchacho que pasó cerca del amor y en el lapso de una hora salió para siempre del jardín de ese dulce sueño?>

Con una introducción impactante, que arranca con una espectacular introspección sobre el paso del tiempo y la relevancia que ciertos momentos tienen en la vida, Zweig teje una preciosa leyenda romántica en la que todo lector se puede ver identificado, demostrando una vez más su gran capacidad empática y psicológica. Además de evidenciar, como es costumbre en él, sus exquisitas dotes narrativas con bellísimas descripciones que embrujan a quienes disfrutan del relato, dibujándose de este modo como uno de los más grandes contadores de cuentos y uno de los supremos creadores de atmósferas del mundo literario. 

Si con Carta de una desconocida conquistó al público hablándole del enamoramiento juvenil y  la fidelidad de una pasión abrasadora a lo largo del tiempo, desde el punto de vista femenino, con Una historia crepuscular se proclama el más grande observador de la naturaleza humana en el universo de lo masculino.

Siempre es pretencioso  afirmar con vehemencia que este u otro creativo es el mejor en algo, bien lo sé. Pero Stefan Zweig consiguió con sus múltiples piezas literarias construir los cimientos que sustentan el ABC del alma humana, conquistó el mundo de lo sensible y tejió con su legado un club imaginario de lectores intelectualmente conectados alrededor del mundo. Goethe decía: “Lo que no comprendemos no lo poseemos”. Zweig nos dio el poder para ver con claridad dentro de nosotros mismos para aceptar como un privilegio el entendimiento, pese al posible sufrimiento. Porque, de todos es sabido que:

 

< “Donde hay más sensibilidad, allí es más fuerte el martirio”.> Leonardo da Vinci

 

Undine von Reinecke ♪

 

 

El autor por la Editorial:

Fuente: Editorial Acantilado

Stefan Zweig (Viena, 1881 – Petrópolis, Brasil, 1942) fue un escritor enormemente popular, tanto en su faceta de ensayista y biógrafo como en la de novelista. Su capacidad narrativa, la pericia y la delicadeza en la descripción de los sentimientos y la elegancia de su estilo lo convierten en un narrador fascinante, capaz de seducirnos desde las primeras líneas. En Acantilado se ha publicado la mayor parte de su obra narrativa y ensayística.