RESEÑA: EL HOTEL ENCANTADO, WILKIE COLLINS
Fuente: Undine von Reinecke |
Ficha Técnica
Editorial: Belvedere
Traducción: Miguel Ángel Herranz
Tamaño: 14 x 21 cm
Páginas: 241
Encuadernación: Rústica
Primera edición: Mayo 2018
ISBN: 978-84-937947-9-8
PVP: 17,50 €
Sinopsis de la Editorial
Lord Montbarry rompe su compromiso con Agnes Lockwood y contrae matrimonio con la condesa Narona. Tras su luna de miel se instalan en un vetusto palacio veneciano junto al asistente de él y el hermano de la condesa. Años más tarde, tendrán lugar una serie de extraños sucesos en la residencia palaciega, transformada en hotel al fallecer Montbarry y desaparecer su asistente.
Propuesta musical para este libro
Venetian Gondola Song es una pieza escrita para piano solo por el compositor romántico alemán Felix Mendelssohn Bartholdy (1809-1847). La obra pertenece al Libro II de sus famosas Canciones sin palabras Op. 30 (Lieder ohne Worte, Heft 2, op. 30), y está catalogada como la número seis del mismo. La obra al completo consta de ocho volúmenes, cada uno de ellos compuesto por seis piezas, que Mendelssohn escribió entre los años 1829 y 1845, y que fueron publicadas en diferentes momentos de su vida. Para comprobar el lirismo y la belleza de estas composiciones sólo hay que pararse a escuchar.
El motivo de mi elección musical de hoy se basa en dos razones: por un lado, el motivo veneciano de la góndola; y, en otro sentido, durante la época victoriana la música alemana tuvo mucha repercusión en la sociedad inglesa. Es más, el marido de la Reina Victoria, el príncipe Alberto de Sajonia-Coburgo y Gotha, sentía predilección por la obra de Mendelssohn.
Lo que Undine opina del libro
<El miedo puede llevar a los hombres a cualquier extremo.> George Bernard Shaw (1856-1950)
Venecia, pocas ciudades despiertan tantas emociones cuando se pronuncia su nombre. Lugar de fascinación durante siglos para pintores, músicos, escritores y artistas en general, este pintoresco rincón de Italia ha ejercido como polo de atracción de visitantes curiosos, generación tras generación. Y no es extraño que así suceda, porque la belleza de sus canales navegables sembrados de embarcaciones de ensueño, conocidas bajo el nombre de góndolas, atraen a turistas del mundo entero los trescientos sesenta y cinco días del año, que esperan disfrutar durante su visita de las estampas únicas que solo este bellísimo lugar puede regalar.
Fuente: Undine von Reinecke, agosto 2023 |
Y allí lo encontré, entre las iglesias y conventos diseñados por el genial arquitecto renacentista Andrea Palladio (1508-1580), que contagiaron con sus bellísimos diseños a muchos de los palacios que hoy adornan el Gran Canal, y que fueron el germen de lo que llegaría a ser el llamado Palladianismo. No, aunque lo parezca, esta palabra no apela a ninguna enfermedad, sino a un estilo arquitectónico que basó sus preceptos en las reglas constructivas y estéticas tomadas de las que elaboró aquel grandísimo artista, evolucionando durante los siglos siguientes, hasta extenderse desde el Véneto al resto de Europa, dejando una huella indeleble en el gusto neoclásico.
Cómo debieron sentirse los viajeros ilustrados de aquellos tiempos, esos jóvenes que realizaban el Gran Tour desde su Inglaterra natal, para completar y finalizar su etapa académica en tierras del Antiguo Imperio Romano. Muchos de ellos se llevaron consigo las ideas de Palladio al retornar a su hogar, y construyeron en sus tierras de la campiña inglesa mansiones y palacios al más “exagerado” estilo palladiano.
Houghton Hall en Norfolk, Colen Campbell (1722). Palladianismo inglés Fuente: Wikipedia |
Esta pasión creativa no desapareció con el paso del tiempo. Yo la he descubierto en muchos de mis autores de referencia. Henry James, Edith Wharton, E. M. Forster… Todos ellos se sintieron atrapados por la Ciudad de los Canales, y situaron en alguna de sus palladianas edificaciones gloriosas e impactantes historias que nos hacen palpitar. La última que he disfrutado corresponde a Wilkie Collins, quien tomó buena nota de lo que a su paso vio en Venecia, cuando acompañó a su padre -el pintor y paisajista William Collins-, en un viaje que realizó a Italia, allá por el año 1836.
Fruto de aquel periplo de Wilkie Collins es El hotel encantado, una obra que publicó en 2018 la editorial Belvedere, con la traducción de Miguel Ángel Herranz.
Fuente: Undine von Reinecke, agosto 2023 |
Logo editorial Chatto & Windus Fuente: Wikipedia |
Como quiera que sea, El hotel encantado, que podría llamar a engaños por el título que posee, y pasar por una típica historia de terror o fantasmal, en realidad encaja mejor con el género del misterio con ciertas reminiscencias de carácter gótico, algo que no sorprende si tenemos en cuenta quién es su autor, ya que, a Wilkie Collins se le atribuye el mérito de ser el creador del thriller novelesco. Aquellos de mis lectores que hayan leído títulos como La dama de blanco (1860), Armadale (1866) o La Piedra Lunar (1868), sabrán a lo que me refiero.
Sin embargo, y pese a que la intriga prevalece sobre lo fantasmal en El hotel encantado, es cierto que durante la narración acontecen sucesos de carácter paranormal, de esos que se investigan hoy en día en los programas de televisión. Por ese motivo me parece una opción estupenda para quienes deseen leer en estas fechas de Halloween una historia entretenida que posee una estupenda ambientación.
Fuente: Undine von Reinecke, agosto 2023 |
Ese es el influjo narrativo que poseen las obras Wilkie Collins, capaces de atraparte entre sus cuidados pasajes, ya sean novelas de gran envergadura, o alguna de sus más humildes creaciones. A éstas últimas pertenece El hotel encantado, una historia breve, cuyo principio argumental se atiene a los clichés clásicos del género en las letras inglesas, que son encarnados por sus personajes principales. Todos juntos componen una galería de arquetipos que, aunque ya conocidos, no dejan de llamar la atención, especialmente si se es admirador del autor. Es cierto que en esta historia los personajes que se presentan como "sospechosos" tienen nacionalidad extranjera, que los británicos parecen poseer la autoridad sobre moralidad, y que las damas del cuento aparecen ante nosotros sin mostrar ninguna de las cualidades que en el tiempo presente se quieren reclamar para las féminas; no cabe duda de que Collins era un hombre de su tiempo y, como tal, seguía las reglas victorianas con gran puntualidad.
Sin embargo, nadie como él para admirar la capacidad de subyugar de las damas, ya fuera por su intelecto o por su gentil personalidad. Sólo hay que analizar a las protagonistas de este misterio, a la siniestra condesa Narona, que fue alabada en su tiempo por ser pionera en su género, y a su antagonista, la constante en sus afectos señorita Lockwood. Entre ambas genera el autor un vínculo de interés, que los personajes masculinos no consiguen superar. Es cierto que la última palabra la tiene el galán de esta historia, pero a mí no me importa quién sea el encargado de poner el punto final. Tratándose de Wilkie Collins, el disfrute se encuentra haciendo el camino.
Cubierta 1ª edición. (Fuente: Wikipedia) |
Por otro lado, el ingenio del autor despierta la hilaridad de quienes se embarcan en esta lectura. La socarronería habitual en el estilo de Collins luce con esplendor, no sólo en la creación de los personajes que utiliza a modo de “graciosos”, como es el caso de las empleadas de servicio que aparecen en la narración, sino en ciertas pullitas que el escritor lanza, destinadas a ciertos colegas escritores del otro lado del Atlántico. Collins se despacha a gusto y con gran discreción. Si mis lectores han disfrutado de Guia para viajeros inocentes 👈del norteamericano Mark Twain, entenderán a lo que aludo, cuando lean en El hotel encantado la diatriba sobre las comodidades en los hoteles y las "preferencias" de ciertos turistas americanos.
Con respecto al valor de este relato, en el sentido de si es una buena lectura o no, debo confesar que adiviné el misterio mucho antes de cerrar el libro, aunque, en mi opinión, eso no quita mérito a la narración. Es cierto que los personajes no están tan desarrollados psicológicamente como en otras novelas, y que la historia podría haber explorado un final alternativo más espectacular. Sin embargo, desde mi punto de vista este misterio consiguió su objetivo, que es el de entretener y agradar.
<El arte de agradar es el arte de engañar.> Marqués de Vauvenargues (1715-1747)
Undine von Reinecke ♪
El autor por la Editorial
Wilkie Collins, Rudolph Lehmann (18809 fuente: Wikipedia |
Buenas tardes Undine, esta fue de las primeras novelas que leí del autor, sin llegar a dar miedo, la atmósfera oscura y siniestra del hotel si es cierto que te produce un ligero escalofrío. Muy bien caracterizado el personaje de la condesa Navona, y aunque Collins en cierta forma se ría de las aprensiones de sus contemporáneos, no deja de reconocer la importancia del terror en el imaginario colectivo.
ResponderEliminarPreciosa la música elegida. Un abrazo.
Buenas tardes, Mar.
EliminarEfectivamente, Collins se reía incluso de su sombra. Eso sí, con respeto a sus contemporáneos y a los diferentes géneros literarios.
Por otro lado, me alegra que te haya gustado la pieza musical elegida para hoy, Para mí es una exquisita obra pianística, muy evocadora.
Un abrazo, y muchas gracias por comentar!!
¡Hola! Me alegra que lo hayas disfrutado aunque le hayas encontrado alguna que otra cosita no tan positiva, como el haber descubierto el misterio antes de tiempo o que los personajes no estén demasiado desarrollados. Un besote :)
ResponderEliminarBuenas tardes, marya.
EliminarLa nouvelle me ha encantado, no creas. Tan sólo advierto de sus puntos flacos para que no lleve a engaños a los lectores más puristas del género. Sin embargo, creo que es una lectura muy entretenida y divertida.
Un abrazo, y gracias por la visita!!
Querida Undine.
ResponderEliminarSe veía venir. Que coincidíamos en opinión con esta lectura. Sí, este tipo de autor le pone el mismo empeño a un relato o un cuento que a una novela. No escatiman esfuerzo. Es una maravilla viajar de su mano por Venecia y por donde haga falta.
Me gustó mucho el misterio, que se adivina pronto como dices pero me quedo con los tejemanejes de los personajes.
Fue mi estreno con Collins. Ahora toca seguir aunque me han dicho que mejor con La dama de blanco o La piedra lunar que con Armadale.
Besitos y feliz Halloween o Santos o día de muertos.
Buenas tardes, Norah.
EliminarPocas veces diferimos en opiniones, al menos de manera notable. No obstante, me alegra que coincidamos en la admiración por Wilkie Collins, siempre es un gusto tener algo en común con una amiga de fatigas.
Un abrazo, y mil gracias por leerme con tanto cariño!!
Hola Undine, leí este libro a finales el año pasado y ya no tuve tiempo de hacer reseña de él. Pero como dices es un buen Collins si te apetece leer algo "cortito" de él...
ResponderEliminarUn besazo
Buenas tardes, Nitocris.
EliminarA mí leer a Wilkie Collins siempre me apetece, y ya tengo preparada otra lectura suya. Espero traerla al blog y que podamos comentarla.
Un beso, y gracias por la visita!!
Buenas tardes, Senyoreta Buncle.
ResponderEliminarQué bien lo debieron pasar tus hijas escuchando tus historias. Espero que la próxima vez tengas la oportunidad de contarles la historia de El hotel encantado, aunque algunas escenas son un poco inquietantes para los niños.
Un abrazo, y muchas gracias por la visita!
Este me encantaría leerlo, hace tiempo que lo tengo apuntado en la lista de pendientes, a ver si hay suerte y para el Halloween que viene... Gracias por avisarnos de que el suspense prevalece sobre el terror sobrenatural, conociendo un poco otras novelas de Wilkie Collins ya imaginaba que sería excesivamente terrorífico (es que soy una floja), pero mejor ir sobre seguro. Me gustó muchísimo "La casa y el cerebro", de Edward Bulwer-Lytton, que me recomendó hace un tiempo MH de Las inquilinas de Netherfield, así que ya ves los niveles de terror clásico que puedo soportar sin desmayarme, jajaja. Besos.
ResponderEliminarBuenos días, Mónica.
EliminarMe he reído mucho con tus palabras. ¿Tú una floja? :)
En serio, Wilkie es delicioso siempre, conociendo los diferentes niveles narrativos que manejaba. El hotel encantado tiene alguna escenilla un tanto morbosa, pero llevadera. Estoy segura que te gustará volver a Venecia de la mano de este gran victoriano.
Un beso, y gracias por visitarme!!
Este escritor aún lo tengo en pendientes, desde hace muchísimo tiempo, tengo otra novela suya la dama de blanco. Espero poder darle una oportunidad
ResponderEliminarBuenos días.
EliminarLa dama de blanco y El hotel encantado son dos obras muy dispares. Te recomiendo que leas antes la primera, porque te dará una idea mejor de la categoría literaria de Wilkie Collins.
Un saludo