RESEÑA: MISS AUSTEN, GILL HORNBY

Fuente: Undine von Reinecke

Ficha Técnica

Editorial: Libros de Seda

Traducción: Emilio Vadillo

Encuadernación: Cartoné con solapas

Nº de páginas: 384

ISBN: 978-84-19386-09-0

Género: narrativa.

P.V.P. : €19,95

* En librerías el lunes 8 de mayo de 2023

Sinopsis de la Editorial

Inglaterra, 1840. Cassandra Austen ha vivido más de dos décadas tras la muerte de su querida hermana Jane. Ha pasado el tiempo visitando a amigos y parientes y trabajando en silencio, determinada a mantener la reputación de su hermana. Con más de sesenta años y una salud frágil, decide irse a vivir con los Fowle de Kintbury, la familia del que fue su prometido, fallecido hace muchos años, cuando ambos eran jóvenes. Quiere encontrar las cartas que su hermana dejó, esquivando a su anfitriona y a una criada entrometida. Cuando finalmente las halla, se enfrenta a los secretos que guardan, no solo sobre su hermana Jane, sino sobre ella misma. ¿Las guardará y legará su historia a futuras generaciones o las entregará a las llamas?

Propuesta musical para este libro

Des Abends (Fantasiestücke, Op. 12, Schumann), Intérprete Alfred Brendel

Des Abends es la primera de las ocho piezas que componen la obra para piano de Schumann, titulada Fantasiestücke, Op. 12, que el músico alemán compuso en 1837. El total de las piezas están inspiradas en una serie de textos de E. T. A. Hoffmann dedicados a la música, y recogidos bajo el título de Fantasías a la manera de Callot (Fantasiestücke in Callot's Manier, 1814-15). Por otro lado, el conjunto de la obra está dedicado a Anna Robena Laidlaw (1819-1901), una pianista británica que el compositor conoció tras uno de sus conciertos en Leipzig. No está clara la relación que unió a la pareja, pero se dice que Robert Schumann recobró el ánimo para componer gracias a la dama. Lo cierto es que el alemán escribió la obra pensando en los personajes Florestán y Eusebius, que representan la dualidad de su propia personalidad.

En cuanto a Des Abends, su significado en español es “Por la tarde”, representaría al personaje Eusebius, en el que reside su “yo” soñador. Con esta pieza quería transmitir ese estado apacible del crepúsculo. ¿Puede haber una pieza musical más amable para acompañar la lectura de Miss Austen?

Lo que Undine opina del libro

<El único privilegio que reivindico para mi sexo -no es muy envidiable; no tiene por qué desearlo- es el de un amor más duradero, aun cuando se haya perdido toda esperanza> Jane Austen, Persuasión (Editorial dÉpoca)

Decía Oscar Wilde que los solteros ricos deberían pagar más impuestos, alegando que no era justo que unos caballeros fueran más felices que otros. Sin embargo, y dejando a un lado el carácter satírico de las palabras de este burlón escritor, para las mujeres que vivieron durante el siglo XIX, la realidad de sus vidas era muy distinta, dispusieran de una fortuna propia o no. A menudo, el devenir de su existencia estaba ligado a la ventura de concertar un buen matrimonio que les diera la oportunidad de hallar un refugio al que poder llamar hogar. En el mejor de los casos, las damas quedaban a disposición de aquellos maridos, dedicando su existencia a traer un hijo tras otro a este mundo, mientras cuidaban de que nada enturbiara la paz marital; otras veces, la esposa quedaba relegada a un segundo o tercer plano, siendo objeto de diversas humillaciones, entre las cuales, la ignorancia de su existencia era la máxima felicidad. Y, pese a todo, cualquier enlace era preferible a la soltería, un estado considerado ignominioso que, muchas veces, dejaba a las féminas expuestas a las burlas de sus semejantes, y la caridad de sus familiares. Este fue el caso de Cassandra Austen, la querida hermana mayor de la famosa escritora del periodo de Regencia, autora de obras inmortales como Orgullo y prejuicio👈 o Persuasión, con la que vivió hasta el final de sus días, compartiendo las dichas y desventuras de su común celibato.

Tom Fowle, prometido de Cassandra 
Fuente: lightbrightandsparkling Blog

No obstante, tanto Cassandra como Jane Austen recibieron sendas propuestas de matrimonio que, por distintos motivos, no llegaron a celebrarse. Si para Cassandra el enlace que había acordado con Thomas Fowle (1765-1797) no se llevó a cabo por motivos tristemente conocidos (murió antes de que pudieran casarse), el misterio y secretismo que envuelve el que adoptó Jane con Harris Bigg-Wither, con el que tan sólo estuvo unas pocas horas prometida, es un un enigma sobre el no se tiene seguridad, aunque es cierto que mucho se ha especulado sobre el tema. La razón de ese compromiso seguido de una rápida ruptura se podría conocer fehacientemente de no haber desaparecido ciertos documentos de carácter epistolar, de los que siempre se ha dicho que fueron quemados por Cassandra.

Este es el principio argumental que subyace en Miss Austen, la esperada y emocionante novela de Gill Hornby, que Libros de Seda ha traído a nuestro panorama editorial, con la traducción de Emilio Vadillo.

Miss Austen narra la historia de Cassandra después del fallecimiento de muchos de sus seres queridos. La novela sitúa la acción principal en 1840, cuando, la ya anciana hermana mayor de Jane Austen, visita la vicaría de Kintbury, hogar del que fuera su antiguo prometido Tom Fowle, bajo el pretexto de ayudar en el duelo por la pérdida de su padre a las sobrinas de éste. Ahora bien, la señorita Austen tiene una misión secreta, encontrar la correspondencia que tanto su hermana Jane como ella misma mantuvieron en otro tiempo con aquella familia, unas cartas que por su contenido podrían enturbiar la imagen de su famosa y querida hermana fallecida. Esta empresa encubierta se convertirá en un fascinante viaje de autodescubrimiento, no sólo para Cassandra Austen, sino para todas las mujeres involucradas en esta historia.

Harris Bigg-Wither, prometido de Jane Austen
Fuente: Hablandodejaneausten.com

Miss Austen es una preciosa y conmovedora novela, en la que la escritora inglesa Gill Hornby, ateniéndose a la información verídica que se tiene sobre la familia Austen y las familias amigas con las que se relacionaron, como los Fowle, los Lloyd o los Bigg-Wither, escribe una ficción en la que se especula con las posibles razones que llevaron a Jane Austen a comprometerse en matrimonio con el hermano de sus amigas Catherine y Alethea Bigg-Wither, para anularlo la mañana inmediatamente posterior a la pedida. Durante el relato, la autora se remontará a los años de juventud de las dos hermanas Austen, comenzando en los momentos previos a los que una serie de imprevistas desgracias, como el malogrado matrimonio de Cassandra, o el abandono de la vicaría de Steventon por parte del reverendo Austen, llevaron a las dos hermanas a viajar junto a sus padres a diferentes lugares de Inglaterra, como Bath, Kent o Portsmouth, sin encontrar en ellos un verdadero hogar. Esta narración es intercalada por una historia paralela, que Hornby sitúa cuatro décadas después, momento en que Jane Austen ya había fallecido y Cassandra era ya una anciana, construyendo así una apasionante trama paralela, que pretende esclarecer el enigma que envuelve la vida privada de las dos damas.

Llegados a este punto, es necesario pararse a comentar que Cassandra Austen (1773-1845), como heredera de su hermana y encargada de cuidar su legado, hizo desaparecer parte de los documentos personales de la famosa escritora, que podrían haber esclarecido algunos puntos interesantes de su biografía. Especialmente esos temas románticos que desde siempre han interesado a los fans de la autora, y que han sido motivo de inspiración para novelistas y cineastas de diferente condición, quienes, con sus creaciones han intentado abrir luces sobre la vida de la autora, y relacionar ésta con los motivos argumentales de sus novelas. 

Cartel del estreno cinematográfico en Reino Unido
Fuente: Wikipedia

Quizá, dos de los ejemplos más notorios al respecto sean la biografía ficticia Becoming Jane Austen (2003) del académico norteamericano John Hunter Spence, que fue adaptada al cine en 2007, y llegó a España con el título de La joven Jane Austen, en la que el autor conjeturaba sobre ese supuesto romance de juventud que Jane mantuvo con Tom Lefroy (1776-1869), y en la que subyace una cierta comparación con Orgullo y prejuicio. Otro ejemplo lo tendríamos en la película de la BBC Miss Austen Regrets (2007), un film dónde el director Jeremy Lovering y la guionista Gwyneth Hughes hablan de ese compromiso anulado por Jane Austen, y de las famosas cartas desaparecidas que escribió, desde la perspectiva de una mujer madura, que afronta los últimos momentos de su vida sin haber conocido el verdadero amor. En ambas creaciones aparece la figura de una Cassandra Austen, fiel confidente de su hermana y compañera de desdichas, pero siempre en un segundo plano, dejando el completo protagonismo a su famosa hermana.

Cassandra Austen (Wikipedia)

En el caso presente de la novela Miss Austen, Gill Hornby focaliza la atención sobre Cassandra, sacándola de ese perenne estancia en las sombras que siempre ocupan las personas cercanas a los grandes personajes, para devolverle la importancia que siempre tuvo en la vida de Jane Austen. Por otro lado, y desde mi perspectiva, Hornby pretende con el retrato que dibuja de Cassandra eliminar esta imagen de pobre y triste “viuda célibe” con el que ha pasado a la historia, otorgándole el respeto y la notoriedad que toda persona merece. Y éste no es el único esfuerzo que Hornby hace para resaltar la figura de las féminas solteras decimonónicas, porque, en realidad, toda la novela es una ofrenda dedicada aquellas mujeres que tuvieron que afrontar sus vidas sin la protección de un marido. Aquellas que no se casaron por diferentes motivos, como la responsabilidad de quedar al cuidado de sus progenitores, por motivos económicos varios, o porque el objeto de su amor no cumplía las expectativas familiares. Algo así como ocurría en la novela Persuasión, en la que Jane Austen, a través de su heroína Anne Eliot, ofrecía un retrato exhaustivo de cómo era la existencia de esas tías solteras, cuya ocupación principal estaba dedicada a las diferentes necesidades de la familia, cuidando de sus sobrinos, atendiendo a los enfermos, o haciendo compañía a desesperantes damas aburridas. Gill Hornby se hace eco de todo ello, y construye una atractiva y enigmática trama, en la que aprovecha para homenajear a todas aquellas mujeres que dedicaron sus días a servir a sus respectivas familias, a cambio de muy poca atención y consideración. 

Con mucho tino y habilidad literaria, la escritora recurre a hechos reales en la vida de Cassandra Austen, como la relación que la unía a Mary-Jane, Elizabeth e Isabella Fowle, las sobrinas de su malogrado prometido, y la utiliza para cimentar su ficción, una historia de amores y desamores, celos, amistad y, por supuesto, mucha solidaridad entre mujeres, en la que subyace más de un enigma que resolverán al finalizar su misión. La veracidad y la invención van de la mano en Miss Austen, para ofrecer al lector una historia creíble, factible, y narrativamente fascinante, que denota un gran esfuerzo estilístico y de investigación, que centra su atención sobre los acontecimiento que rodearon a la familia Austen.

Antigua vicaría de Kintbury, donde sucede Miss Austen, y actual hogar de
 Gill Hornby (Fuente: Wikipedia)

Y si menciono a la familia Austen, es porque en la novela aparecen muchos motivos argumentales y nombres de personas reales que estuvieron ligados a la historia de este conocido linaje. Noviazgos, matrimonios, nacimientos, muertes, herencias… En definitiva, todo lo que conformó la existencia de los Austen, especialmente en relación con la vida de Jane y Cassandra, desde su juventud hasta el fallecimiento de las mismas, y que Hornby trata en la novela con suma delicadeza, ateniéndose casi en cada momento a la historia real. Tan sólo recurre a la ficción para rellenar los huecos biográficos ocasionados por la falta de información documentada de la que disponemos. Aquí hago un inciso para señalar que Hornby, antes de publicar Miss Austen, la puso en las manos de grandes autoridades sobre el tema austenita, quienes dieron el visto bueno a su novela. Por otro lado, la autora señala las fuentes autorizadas y reputadas que consultó.

He de decir, que quienes sientan una fuerte ligazón por el universo Jane Austen, independientemente de la idea particular que cada uno de nosotros guardemos en el corazón sobre la personalidad de esta maravillosa autora, encontrarán en Miss Austen un texto para solazarse leyendo sobre los momentos importantes de su vida. Algunos de ellos consiguen divertirnos, unos pocos nos sobrecogerán, y otros, no podía ser de otro modo, estimularán nuestras lágrimas, por su carácter intensamente emocional. Ni que decir tiene que toda la novela está salpicada por interesantes escenas biográficas de los momentos en los que Jane escribía sus maravillosas obras, cobrando más importancia sobre el total de ellas Persuasión, que tiene especial importancia en la trama ubicada en 1840. Dejo a mis lectores que descubran qué se esconde tras ella, y qué ocurre con las heroínas que la protagonizan. Sin embargo, debo resaltar la finura con la que Gill Hornby emula esa sociedad de Regencia con la que Jane Austen ambientaba sus obras, destacando también como una observadora de primera en lo relativo a las costumbres, a la “etiqueta”, y, en definitiva, al comportamiento social.

Retrato de Jane Austen, Cassandra Austen (1804)
Fuente: Wikipedia

Con respecto a la estructura narrativa que sigue la novela, más allá de las dos tramas ubicadas en diferentes tiempos, que fluyen con naturalidad, Miss Austen se apoya en las epístolas ficticias escritas por Gill Hornby que acompañan y sostienen la trama de 1840, y actúan como nexo de unión para el misterio que la envuelve. Por otro lado, el relato se inicia a finales del siglo XVIII, justo en el momento en que Cassandra se promete en matrimonio con Tom Fowle, y finaliza de modo tremendamente conmovedor en 1840, al fundirse las dos historias en una, cuando la protagonista consigue su misión. Entre ambos momentos, se suceden muchos episodios interesantes, en los que disfrutamos de grandes momentos que relatan la vida emocional y amorosa de las dos hermanas Austen, que es comparada con la realidad de las Fowle, mujeres que pertenecieron a la siguiente generación, y que se enfrentaron a similares circunstancias. Debo decir que, paralelamente a ese enigma que la anciana Cassandra Austen se propone resolver, saldrá a la luz un bonito romance que tuvo lugar en la vida real.

Sin embargo, y pese a lo palpitante que ha sido bucear en la historia que ha construido Gill Hornby, para esta lectora lo más emotivo ha sido reencontrarse con ciertos personajes. Si leer acerca de Jane Austen ha conseguido impresionarme, más importante ha sido la imagen que la autora ha construído en su ficción para Cassandra Austen y Martha Lloyd. La primera, hermana por nacimiento, y la segunda, por cercanía emocional. El retrato que Hornby ha hecho de ambas mujeres me ha robado el corazón.

James Edward Austen-Leigh, sobrino de Cassandra y
Jane Austen (Fuente: Wikipedia)

En un sentido muy distinto, pero no menos interesante, Miss Austen también deja un hueco para el humor. Esto lo consigue la autora añadiendo pimienta a la trama con la intervención de ciertos personajes que no nos son simpáticos a quienes nos sentimos unidos a Jane Austen. Así ocurre por ejemplo con Mary Lloyd, la esposa del reverendo James Austen (1765-1819), hijo mayor de la familia Austen, a quien Gill Hornby otorga el mismo carácter singular, propio de una caricatura dickensiana, similar al que podemos adivinar tras leer la correspondencia que nos ha quedado del intercambio epistolar entre Cassandra y Jane Austen en la vida real. La escritora de Regencia dedicó a su cuñada Mary algunos pasajes muy punzantes que nos invitan a especular sobre su cuestionable carácter. Gill Hornby lo refleja de manera hilarante en su novela, y se despacha a gusto, no solamente contra ella, sino que también cuestiona con mucha agudeza la autoridad literaria de James Austen, y la de su primogénito, el escritor James Edward Austen-Leigh, autor de una biografía sobre su famosa tía, que no ha sido bien recibida por una parte importante de la crítica. Y parece justa esta pequeña venganza, ya que la familia Austen Lloyd parecía sentir ciertos celos por el éxito literario de la tía Jane …

Y sin embargo, lo que prevalece durante toda la lectura de Miss Austen es el respeto por aquellas mujeres a las que hacía mención al comienzo de la presente reseña. Solteras de muy distinta clase y condición, a las que unía un destino similar, en el que anidaba la certeza de una existencia dedicada por entero al prójimo, que finalizaría en la más triste soledad.

Gill Hornby, que ahora vive en la vicaría Kintbury, el mismo lugar donde transcurre la acción principal de su novela, quiso dar visibilidad en ella a la persona de Cassandra Austen, y a las mujeres solteras de la generación posterior que vivieron en aquel lugar, en un acto de tremenda generosidad y reconocimiento a todas ellas. Y este bonito homenaje literario quedará fijado en la memoria de muchos lectores, como un epitafio inmortal de amor y solidaridad.

<Las mujeres no miden jamás los sacrificios; ni los suyos, ni los de los demás.> Germaine de Staël (1766-1817)

Undine von Reinecke ♪

La aurora por la Editorial

Fuente: Libros de Seda

La primera novela de Gill Hornby, The Hive, pronto se convirtió en un best seller y recibió muy buenas críticas, al igual que la segunda, All Together Now. Vive en la actualidad en la vicaría de Kintbury, el mismo sitio en que Tom Fowle, el prometido de Cassandra Austen, creció. Es la hermana de Nick Hornby y la esposa de Robert Harris, por lo que ha pasado toda su vida rodeada de escritores y libros. Debuta en español con dos de sus libros: Miss Austen y Godmersham Park, publicados en 2023 por Libros de Seda.