RESEÑA: HUMUS, RAUL BRANDÃO
Fuente: Undine von Reinecke |
Ficha Técnica
Editorial: Caleidoscopio de Libros
Categoría: Clásicos Moderno
Traducción y prólogo: Verónica Palomares Maíllo
Idioma original: Portugués
Encuadernación: Rústica con solapas
Formato: 14,5 x 21,5
Número de páginas: 240
Precio: 20,80 €
ISBN: 978-84-19930-03-3
Sinopsis de la Editorial
(...) Llena de pasajes de gran profundidad filosófica y poética, la obra, escrita bajo la forma de un diario fragmentado, toma como espacio central una villa sin nombre. Este lugar, que representa toda la escala social y existencial de lo humano, será el escenario que pueblen distintos personajes.
Entre figuras desdibujadas hasta lo grotesco, detenidas por costumbres e imperativos morales absurdos, se erige una voz fundamental: la de Gabiru, dispuesto a descender hasta lo más profundo de la conciencia humana, para llegar al humus existencial que media entre la vida y la muerte (...).
Propuesta musical para este libro
La pieza que el lector está escuchando es Le Poème de l'Extase, Op. 54 (poema del éxtasis), compuesto por el ruso Alexandre Scriabin (1871-1915) entre 1905 y 1908. Y, aunque es un poema sinfónico, está considerado la cuarta sinfonía de su autor. Es una obra de transición entre el estilo más tonal de las tres primeras sinfonías y su famoso poema sinfónico Prometeo o el Poema del Fuego (1908-1910), la obra maestra de su madurez. Scriabin acompañó Le Poème de l'Extase de un texto de su autoría, que estaba formado por trescientos sesenta y nueve versos que el compositor publicó en 1906.
Mi propuesta musical para la reseña de hoy se debe a varios motivos. El primero de ellos es que Scriabin y Brandão fueron contemporáneos, y el segundo, que ambos artistas fueron precursores de un nuevo lenguaje, y el lirismo de ambos impregnó el conjunto de sus respectivas obras.
Lo que Undine opina del libro
<Cuando ya no queda esperanza, queda aún el canto> Víctor Hugo (1802-1885)
No es aventurado pensar, que la memoria del tiempo no siempre hace justicia con sus protagonistas, que existen personajes que han pasado a la historia con una preponderancia mediática justificada, pero no mayor, que otros sujetos de semejante valor. Y así, su legado trasciende en el tiempo como un objeto preciado que la humanidad se ve impelida a atesorar. Lo mismo ocurre con la imagen de algunos países, cuya circunstancia parece haber sido siempre crucial para el resto del mundo, sin que se tenga en cuenta la participación en la historia de una u otra nación. Esto se ha visto siempre reflejado en todos los campos, ya sea en política, cultura o el mundo científico. Lo cierto es que en nuestros días, tan influidos por los medios de comunicación, parece que, principalmente, ha tenido importancia lo acontecido en el mundo anglosajón, por el que yo misma confieso tener una gran proclividad.
Fuente: Caleidoscopio de libros |
La mayoría de mis lectores se preguntarán quién es Raul Brandão, yo misma me planteé esa cuestión. Y no es extraño que esto suceda, porque su nombre no se escucha frecuentemente en el espacio literario español. Sin embargo, este autor fue un intelectual muy respetado en su tiempo, uno de esos individuos cuyo legado fue decisivo para el desarrollo de las letras portuguesas, aportando una pieza fundamental al nuevo lenguaje que buscaba en su tiempo la esfera intelectual internacional.
Raul Brandão (1867 Foz do Douro , Oporto - 1930, Lisboa) fue un escritor, poeta y militar, que nació en el seno de una familia de pescadores, circunstancia que le marcó profundamente y que se convirtió en una fuente de inspiración para su obra futura, donde terminaría plasmando las estampas que vio y experimentó. Su primera formación académica la recibió cerca de su hogar, trasladándose con los años a Oporto, donde descubriría el ambiente intelectual, por el que sintió gran afinidad, y que fue la razón que lo impulsó a escribir. Fue también en aquella ciudad donde consiguió publicar sus primeras piezas, dos cuentos de carácter naturalista, titulados Impressões y Viagens, que vieron la luz en 1890. Sin embargo, y tras un breve paso como oyente por la Escuela Superior de Letras, el escritor decidió ingresar en la Academia del Ejército. Fue así como inició una larga carrera militar dentro del Ministerio de la Guerra, que conciliaría con sus intereses literarios, ejerciendo paralelamente la profesión de periodista. Durante este periodo de su vida, Brandão publicó artículos de prensa, dedicó tiempo a construir su universo lírico, escribió obras de teatro y, por supuesto, experimentó con la narrativa. Ningún campo escapó a sus habilidades como escritor.
Edición en portugués, editorial Opera Omnia Fuente: Amazon |
Por otro lado, en esa singularidad que define su prosa hay quienes han visto la influencia de grandes literatos. Entre ellos estarían el postromántico Fialho de Almeida (1857-1911), el excepcional poeta de la Escola Nova Abílio Manuel Guerra Junqueiro (1850-1923), el ruso Leon Tolstoi (1828-1910), y su compatriota Ivan Turgenev (1818-1883), del que Brandão tomó ese característico nihilismo que asoma en el conjunto de su obra. Estas insignes fuentes de referencia ayudaron a que germinara en él esa singularidad que define su pluma, aquella que le dio el prestigio al que me refería líneas arriba, de haber sido proclamado como uno de los autores más importantes de la literatura portuguesa de todos los tiempos.
Qué duda cabe, que gran parte de ese honor es debido a Humus, la obra que es considerada como el cénit de su carrera como literato, que es también el texto protagonista de la reseña de hoy.
De izquierda a derecha, J. M. Laforquet, Sofía Castro Pereira y Verónica Palomares Maíllo (Fuente: Undine von Reinecke) |
Aquella tarde me sirvió para concebir la reseña que quería escribir, y puedo asegurar a mis lectores que era un tema que me tenía preocupada, porque Humus es un texto que se sale de corriente, y posee cierta dificultad a la hora de describirlo. No podemos hablar de él como una novela, aunque parece querer contarnos varias historias; ni podemos definirlo como un diario, pese a estar dividido en entradas fechadas a lo largo de un año; tampoco es posible considerarlo obra poética aun gozando de un intenso y profundo lirismo; y, aunque son muchas las reflexiones que en este escrito aparecen, considerarlo como un ensayo es aventurado. Digamos que Humus es globalmente todo lo anterior y nada de lo dicho en solitario, una obra profundamente original y vanguardista que, en el momento en que apareció, rompió todos los esquemas conceptuales y literarios. Y, por ese motivo, es difícil ofrecer una sinopsis al uso del libro.
Sin embargo, en apariencia, Brandão parece querer narrar la historia de una mansión en decadencia, habitada por tres señoras ancianas que pasan el tiempo jugando a la brisca, y son atendidas por una decrépita y servil mujer de servicio. A este lugar, un tanto lúgubre y destartalado, llega el narrador de esta obra. Este personaje es el encargado de acercar ese mundo brumoso al lector.
Un momento de la presentación de Humusn en la librerí Los pequeñosSeres Fuente:Undine von Reinecke |
De hecho, y aunque esta obra conoció tres ediciones, la primera de ellas vio la luz en el año 1916, el mismo año en que Portugal entró oficialmente en la Gran Guerra. Mis lectores recordarán que la nación portuguesa se mantuvo neutral al principio de la contienda. No obstante, su condición como tradicional aliado de Inglaterra provocó hostilidades contra el Imperio Alemán en las colonias africanas y, finalmente, en marzo del año anteriormente citado, Portugal entró a formar parte de la Alianza. La participación portuguesa en la contienda ocasionó a la nación grandes problemas sociales, provocados por el bloqueo marítimo, que dio lugar a la inflación y el desabastecimiento. Todo ello fue el origen de revueltas y movilizaciones anarco-sindicalistas, que primero desembocaron en el golpe de Estado de Sidónio Pais en 1917, para luego, en 1919, volver a instaurarse la Constitución de 1911 y, tras ocho años de inestabilidad social y más golpes de Estado, en 1926 triunfó una toma de poder, que impuso la dictadura militar del llamado Estado Novo (1933-1974).
Y en este contexto social se enmarca Humus. Pueden imaginar mis lectores qué intenciones movían a Raul Brandão, un hombre tan comprometido con los desfavorecidos, cuyas ideas apuntaban hacia nuevas fronteras. Su mirada, intensamente compasiva y audaz, apelaba contra todo conservadurismo político y espiritual. Por ese motivo, en Humus Brandão trata muchos temas trascendentes para el individuo, como la riqueza y la pobreza, el bien y el mal, la existencia o la ausencia de Dios… En definitiva, todo lo que es trascendente en esta vida y, quizá, después de la muerte. Él niega y afirma en diferentes momentos esa posibilidad. Todo se asiente, todo se refuta, el lector es invitado a reflexionar.
Los entendidos hablan de Humus como un texto múltiple fragmentado por el desdoblamiento de personajes y de ideas que en él aparecen, y que aproximan la obra a esas corrientes de modernidad que antes mencionaba. De hecho, los temas que toca y el espíritu del que goza, hacen de Humus una obra universal. Pasado, presente y futuro se dan la mano en este título completamente atemporal.
Lectura de Humus por la traductora Verónica Palomares Fuente: Undine von Reinecke |
La simbología de Humus es digna de estudiar y, desde mi punto de vista, es un título imprescindible para comprender las Vanguardias. Es más, yo aconsejaría esta obra como lectura de referencia a los estudiantes, principalmente a quienes están especializándose en carreras artísticas y de humanidades.
En otro sentido, la atmósfera que construyó Brandão para su obra posee un bucólico y profundo lirismo, que provoca en el lector emociones cercanas a la sinestesia. El ambiente que recrea el autor se dibuja en la mente de quienes se introducen en él como un sueño perturbador, o quizá semejante a un trágico fragmento cinematográfico. Es más, el comienzo de la obra quiso traer hasta mí algunos momentos que el cineasta Alejandro Amenábar recreó para su película Los otros (2001), cuando aquel fantasmal soldado se acerca y nunca llega a la famosa mansión. Así de sugestiva es esta obra.
Y hasta aquí llega mi reseña de hoy. Ha sido un placer acercarme por primera vez a la pluma de Raul Brandão. Humus ha sido una lectura compleja, comprometida y muy diferente, de esas que dan carácter, motivan y construyen al lector.
<Los poetas inmaduros imitan; los poetas maduros roban; los malos estropean lo que roban, y los buenos lo convierten en algo mejor.> T. S. Eliot (1888-1965)
Undine von Reinecke ♪
El autor por la Editorial
Fuente: Caleidoscopio de Libros |
Formó parte del grupo de escritores finiseculares de raíces simbolistas, colaboró con el grupo literario Os Nefelibatas y llegó a conocer los movimientos de vanguardia y la generación de Orpheu, a la que pertenecía Fernando Pessoa. Sin embargo, fue un autor que siguió un camino propio dentro de la literatura del siglo XX.
La importancia del autor en la historia de la literatura portuguesa radica en la originalidad de su escritura. Humus está considerada su mejor obra y una de las más influyentes e innovadoras de la literatura portuguesa contemporánea, gracias a su ruptura con las convenciones literarias y estéticas de su tiempo.
Hola queridísima, pues creo que esta vez no me lo llevo. Me da la sensación de que se sale muchísimo de mi zona de confort.
ResponderEliminarUn besazo
Buenos días, Nitocris.
EliminarAsí es, este libro pertenece a un género muy diferente al que sueles leer. Si algún dí decides leerlo, debes adentrarte en él con la intención de descubrir un mundo nuevo y complejo.
Un abrazo, y gracias por visitarme!!
Buenas tardes Undine, no me suena de nada el escritor y aunque no es lo que suelo leer, me parece interesante porque resulta una historia diferente, sugestiva y rompedora, no sé si voy a leerla pronto, posiblemente no, pero me la guardo en mi lista para el momento adecuado. Gracias por traernos libros distintos y abrirnos a títulos que de otra forma no sé cruzarían en nuestro camino. Un abrazo.
ResponderEliminarBuenos días, Mar.
EliminarEfectivamente, Humus es un texto muy diferente del género de la novela realista, que es lo que tú y yo solemos reseñar. No obstante, tu intuición es correcta al interesarte por él, ya que su lectura es sumamente instructiva. De esas que abren nuevos caminos. Ya me comentarás si te decides a descubrirlos.
Un abrazo, y gracias por leerme!!
¡Hola! Ahora mismo estoy en un momento en el que me está costando bastante conectar con lo que leo, por lo que busco historias sencillitas. Quizás en otra ocasión me vendría bien leer algo así pero ahora mismo trato de leer algo totalmente distinto. Un besote :)
ResponderEliminarBuenos días, Marya.
EliminarEntiendo lo que comentas perfectamente. Cuando pasamos por una racha de bloqueo lector, lo que necesitamos son títulos ligeros que nos estimulen. Humus es un texto fascinante, pero denso. Si algún día te decides a leerlo, debes adentrarte en él sin prejuicios y sabiendo que es un universo literario muy diferente del que sueles leer.
Un abrazo, y mil gracias por la visita!!
Buenas noches, Undine.
ResponderEliminarSi me piden decir escritores portugueses solo diría Saramago y Eca de Queirós de los que todavía no he leído nada, no, tampoco El ensayo de la ceguera. Y durante mucho tiempo pensaba que Nélida Piñón también lo era.
Y de la historia de Portugal pues qué voy a saber, cuatro cosas de las pelis así que igual hasta lo sé mal.
La Brisca, ese fue el único juego de cartas que yo supe durante muchos años. Luego aprendí el Tute y la escoba pero no me gusta nada jugar porque tengo un mal perder terrible. Vamos que cuando estoy viendo una competición y no gana mi favorito dejo de verla al final para no ver ganar al otro. Así soy, muy mal, lo sé.
Este libro que nos traes a mí es fe los que me dan miedo porque pienso que no los voy a entender y no voy a saber qué me quieren contar. Y me frustro mucho. Pero la verdad es que lo has vendido muy bien y me ha llamado la atención sobre todo esa atmósfera bucólica y como intrigante. Además de ser un libro diferente a mis lecturas habituales.
Me lo voy a pensar. A ver si se animan en la biblio que por cierto como me mezclan portugueses con brasileños por culpa del idioma, me hago el lío.
Besos y feliz feria del libr. A disfrutar a tope.
Buenos días, Norah.
EliminarPara mí también ha sido todo un descubrimiento este escritor. Hasta el momento actual no conocía nada de él, ni su nombre ni su obra. Sin embargo, tras adentrarme en su legado, me ha transmitido el aroma y el fervor de los cafés literarios modernistas, una experiencia alucinante. Con todo y con ello, debo admitir que Humus es una lectura compleja, y hay que adentrarse en ella con el ánimo de aprender. Tras su lectura me sentí como en los mejores momentos de mi etapa universitaria.
Un abrazo, y gracias por leerme con tanta atención!!
Buenos días, Undine.
ResponderEliminarPues ciertamente, no tenía ni idea de este autor. Conozco a Saramago y a Eça de Queiroz. A los dos los he leído y ambos me han gustado mucho. También conozco a Fernando Pessoa y Lobo Antunes, aunque a éstos no los he leído. Siempre me ha parecido curioso lo de espaldas que vivimos a Portugal. Es el país que más cerca tenemos y uno de los que más desconocemos. A mí también me atrae mucho el mundo anglosajón, sobre todo el del otro lado del Atlántico. Anoto Humus. No sé si me animaré a leerlo, pero lo tendré en cuenta.
Un beso.
Buenos días, Rosa.
EliminarComparto tu perplejidad y tus impresiones sobre el poco contacto que establecemos con Portugal. He viajado en dos ocasiones a este precioso país, y todo lo que he visto me ha maravillado. Ojalá la relación con esta nación se estreche en el futuro, tanto cultural como amistosamente.
Un abrazo y gracias por comentar!!