RESEÑA: EL AFFAIRE AUSTEN, MADELINE BELL

Fuente: Undine von Reinecke

Ficha Técnica

Editorial: Libros de Seda

Traducción: Noelia Pousada Lobeira

Nº de páginas: 320

Encuadernación: Rústica con solapas

Género: Fun Romance; Romántica.

P.V.P.: 19,95 €

ISBN: 978-84-10481-08-4


Sinopsis de la Editorial

Tess es una actriz de segunda que ha crecido viendo películas de Jane Austen una y otra vez con su madre y soñando con trabajar algún día en una de ellas. Cuando por fin consigue el papel de protagonista en la adaptación de La abadía de Northanger, decide demostrar su valía. Pero hay un problema, y es que su guapo compañero de reparto, Hugh Balfour, no le deja espacio para destacar. Entonces, un accidente eléctrico hará, nunca mejor dicho, que «las chispas salten entre ellos». Ambos se verán trasladados a otra época en la que, para sobrevivir, no les quedará otra que cooperar, aunque sea a regañadientes.


Propuesta musical para este libro

Tis The last Rose of summer, Thomas Moore/Friedrich von Flotow

*Crédito del vídeo: Canal de YouTube NapatMusic

La pieza que el lector está escuchando es The last Rose of Summer, una balada tradicional irlandesa, cuya letra pertenece al poeta Thomas Moore (1779-1852), que escribió en 1805, mientras se hospedaba en el castillo de Jenkinstown, en el condado de Kilkenny, Irlanda. Cuenta la sabiduría popular, que Moore se inspiró en un ejemplar de Rosa Old Blush para componer estos versos.

Por otro lado, la música que acompaña el poema es una melodía tradicional irlandesa titulada Aisling an Óigfhear (El sueño del joven), que fue transcrita por Edward Bunting en 1792 y que, a su vez, se basó en una interpretación realizada por el arpista conocido bajo el seudónimo de Denis Hempson en el Festival de Arpa de Belfast. Finalmente, el poema y la melodía se publicaron conjuntamente en diciembre de 1813 en el volumen 5 de la colección Irish Melodies de Thomas Moore.

El acompañamiento original para piano fue escrito por John Andrew Stevenson. Sin embargo, la pieza se hizo tan popular que, durante los siglos XIX y XX, no dejaron de aparecer diferentes arreglos de la melodía. Sirvan como  ejemplo las dos versiones publicadas por Beethoven en 1816 y 1819, la firmada por Felix Mendelssohn en 1827, o la que realizó el compositor alemán Friedrich von Flotow para el aria Letzte Rose de su ópera Martha (1847), que es la que estamos escuchando hoy.

He elegido The Last Rose Summer para acompañar la reseña de hoy, porque Madeline Bell la utiliza como motivo en una escena de su novela El affaire Austen. La autora neoyorquina la menciona como un guiño a la escena que interpreta al piano Anya Taylor-Joy en la adaptación de 2020 de la novela Emma de Jane Austen.

EMMA (2020) - Piano Rivalry Scene (2/10) 

*Crédito del vídeo: Canal de YouTube Movieclips

*TM & © Focus Features (2020)


Lo que Undine opina del libro


<He buscado el sosiego en todas partes, y sólo lo he encontrado sentado en un rincón apartado, con un libro en las manos.> Thomas De Kempis (1380-1471)


Decía el actor y escritor español José Luis Villalonga (1920-2007), que un libro de cabecera no se escoge, se enamora uno de él. En este sentido, en mi caso personal, son varios los títulos y autores que se disputan ese amor, aunque la mayoría tienen un punto en común: el nombre de Jane Austen. Sus novelas, sus cartas, las piezas de juventud o las biografías, ensayos y retellings que se escriben sobre su obra y persona, adornan mi mesilla de noche y van aumentando año tras año, invadiendo incluso el suelo de mi habitación. Es cierto que alguna que otra obra de condición y autor excelente se cuela de vez en cuando, pero Jane es la reina indiscutible del espacio literario de mi corazón.

Fuente: Libros de Seda

El último título austenita que he disfrutado con una sonrisa perenne es El affaire Austen de Madeline Bell, una novela que ha puesto recientemente en las mesas de novedades la editorial Libros de Seda, con la que inician su colección Fun Romance, y que ha sido traducida por Noelia Pousada Lobeira.

Con la reseña de El affaire Austen, y durante las próximas semanas, Lecturas de Undine se une a las celebraciones que se vienen realizando este año 2025, en conmemoración al 250º aniversario del nacimiento de la genial autora de Regencia. 


El affaire Austen comienza así:


< Es una verdad universalmente reconocida que las mujeres, desde tiempos inmemoriales (bueno, desde 1995), están obsesionadas con Colin Firth. Mi madre no era una excepción.

De mi más tierna infancia recuerdo estar acurrucada junto a ella en el sofá, con un cubo enorme de palomitas en su regazo, viendo a Elizabeth Bennet poner a parir al señor Darcy después de lo ridícula y torpe que fue su primera propuesta de matrimonio. En una ocasión, mamá apuntó al televisor con el mando a distancia y pausó la adaptación de la BBC el tiempo justo para decirme:

-Pero ¿tú has visto qué patético? Y una cosa te voy a decir: la propuesta de matrimonio de tu padre fue incluso peor.>


El affaire Austen nos traslada a la Inglaterra de nuestros días, concretamente al condado de Hampshire. Allí conocemos a Tess, una joven actriz norteamericana de culebrones juveniles, hija de una familia monoparental, que ha crecido rodeada de las novelas de Jane Austen, y disfrutando en bucle junto a su madre, una y otra vez, todas y cada una de las adaptaciones que se han realizado de éstas. El sueño de Tess es vestirse de Regencia, y protagonizar alguno  de esos guiones austenitas que se producen tan a menudo. Su carrera, debido a circunstancias personales, no va precisamente viento en popa. Por ello, cuando consigue el papel de Catherine Morland en el último rodaje de La Abadía de Northanger, la actriz quiere darlo todo en su trabajo para relanzar su carrera y aportar un poco de brillo a su vida. Sin embargo, Tess no lo tendrá fácil, porque Hugh Balfour, su atractivo y esnob compañero de reparto británico, le pone la zancadilla constantemente.

Así las cosas, cuando la última pelea entre los dos coprotagonistas desemboca en un potente accidente de carácter eléctrico, la descarga que reciben ambos actores los traslada a otra época, y, debido a ello,  se ven obligados a colaborar si quieren sobrevivir en esa nueva realidad.

Edición en inglés de Saint Martin's Griffin,U.S.
Fuente: Amazon.es

El affaire Austen es una divertida y adictiva comedia romántica, un chispeante enemies to lovers lleno de humor, romanticismo y, por qué no decirlo, una dosis de ardiente sensualidad. De hecho, la autora, en los agradecimientos de la novela, aconsejó a su familia saltarse el capítulo veintisiete…

Hilarante y llena de guiños cinéfilos y metaliterarios, El affaire Austen obra como un respetuoso tributo a la figura de Jane Austen que, desde mi punto de vista, no perturbará el sentir del austenita más canónico. Me explico, Madeline Bell no intenta imitar en su novela el estilo narrativo de Jane, ni tampoco pretende reconstruir ninguna de sus historias. Lejos de ello, la neoyorquina se divierte imaginando un escenario típico austenita, con sus mansiones nobles, su pueblo pintoresco, sus salones de baile, sus landaus y, por supuesto, con la presencia imprescindible de la Landed gentry esa histórica clase social británica, compuesta por la baja aristocracia rural, los ministros de la iglesia y los gentlemen que, adinerados o no, disfrutaban de la vida sin trabajar. 

Al más puro estilo Lost in Austen (2008) -miniserie de la ITV protagonizada por Jemina Rooper y Eliot Cowan que narra el intercambio de vidas entre Elizabeth Bennet y Amanda, una fan de Orgullo y prejuicio que viaja desde el siglo XXI a la Inglaterra de Jane Austen-, Madeline Bell aborda su su novela utilizando un motivo argumental que recuerda a la producción británica, pero que dió como resultado una historia completamente original. Como nexo entre ambas, en las dos obras nos topamos con sendas heroínas que utilizan un hilarante flujo de conciencia para comunicarse con el lector.

De este modo, la protagonista de El affaire Austen, lo mismo te compara, con mucha comicidad, cualquier suceso que ocurre en el transcurso de la novela con las escenas que ésta recuerda de Emma, Orgullo y prejuicio o Sentido y sensibilidad, o te confiesa las impresiones que le despiertan los apretados pantalones que se ve obligado a llevar Hugh para conseguir ese aspecto característico de los caballeros de Regencia. 

Sudbury Hall, Derbyshire (2015) Fuente: Undine von Reinecke

Sin complicarse con excesivos datos historicistas, que muchas veces estropean la veracidad de este tipo de narración, Bell dibuja un animado cuadro ambiental que sostiene con fuerza su ficción. Y es ahí donde coloca a la pareja protagonista, dos actores del siglo XXI que, quieran o no, deberán trabajar hombro con hombro para sortear el curso de los acontecimientos. Su primera misión, adivinar cómo volver a su tiempo. 

Pero no adelantemos acontecimientos, porque lo mejor es conocer primero su situación. ¿Dónde han llegado exactamente, y cómo deben conducirse para introducirse entre los habitantes del lugar sin despertar sospechas?

Como pueden adivinar las personas que han llegado hasta aquí, no debo adentrarme mucho más en la historia de El affaire Austen sin cometer spoiler, robando a los lectores las emotivas sorpresas que les tiene preparadas Madeline Bell. 

Con todo y con ello, creo conveniente comentar que Tess y Hugh aterrizan en pleno año 1815, en el mismo lugar del Hampshire del siglo XXI donde estaban rodando La Abadía de Northanger. Casualmente, cerca de esa localización se encuentra la casa ancestral del guapo y seductor actor. Con estos ingredientes, ya se lo pueden ustedes imaginar, se organiza una ingeniosa comedia de enredo, 50% austenita y 50% shakesperiana, de la modernidad. 

Lo mejor de todo es, desde mi punto de vista, la complicidad que, poco a poco, va surgiendo entre la pareja. Y, aunque ésta es esperada desde el comienzo, no deja por ello de resultar emocionante, porque Tess y Hugh guardan para sí sendos problemas íntimos que, al compartirlos, obran entre ellos de manera especial.

Basildon Park, 2013 (Fuente: Undine von Reinecke)
De hecho, gran parte del éxito de El affaire Austen reside en los personajes, especialmente en estas figuras principales. Ella, Tess, una chica americana, moderna y un poco desastre, que debe moderar su lengua para encajar en el Hampshire del siglo XIX; él, Hugh, un joven de veintiocho años, ídolo entre las celebrities femeninas, que ha sido educado en los mejores centros académicos ingleses, tales como Eton, con lo que todo eso implica, y, por ello, sobre él recae la responsabilidad de intentar infiltrarse con éxito en la particular sociedad que les ha acogido. Contemplar los líos en los que se mete esta pareja de comediantes a lo Mark Darcy y Bridget Jones, es uno de los deleites que ofrece esta ficción.

El resto del reparto decimonónico lo componen oficiales del ejército inglés, debutantes en busca del amor, doncellas despechadas, damas entrometidas y sus nobles caballeros, incluso también aparece un pastor de la iglesia, con sus dos hermanas solteronas, y un pequeño diablillo de cinco años tan travieso como juguetón. Aquí hago un inciso, para comentar que durante la novela se produce un interesante cameo del mundo real…

Sea como sea, todos los personajes interactúan con los protagonistas sin sospechar quienes son en realidad, ¿o tal vez no? De hecho, este último punto es lo que aporta gran parte del dinamismo a la trama, que está bien pensada y no da descanso al lector.

Por otro lado, desde mi punto de vista, la autora se coronó con éxito solucionando las irregularidades temporales que, bien por desconocimiento o bien por descuido, suelen encontrarse en textos dedicados a viajeros en el tiempo.Y confieso que estaba preparada para anotar las incongruencias temporales que pudieran aparecer en la novela y que, de hecho, se materializan en favor de la emoción. No obstante, no hubo ocasión de apuntar en mi libreta, porque, aunque Tess la lía parda cada dos por tres intentando provocar a Hugh, Bell termina explicando cada cuestión. 

No quiero finalizar esta reseña sin mencionar el aspecto del texto que más me ha gustado. Estoy hablando de los motivos ambientales de la narración antes mencionados. Estos se apoyan en las seis grandes obras de Jane Austen, en las adaptaciones a la Gran Pantalla y televisivas, y en algunos retellings contemporáneos de las mismas. Bell, como gran admiradora de Austen, los introduce con chispa y lucidez, provocando la sonrisa y complicidad del lector. Tan sólo quiero poner una objeción a ciertas palabras escritas por Madeline Bell en la novela, en mi opinión,Tess, la heroína de esta narración, tiene mucha más gracia que Dakota Johnson en Persuasión 2020.

Y hasta aquí llegan mis impresiones de El affaire Austen, un libro que devoré en pocas horas, regalándome momentos delirantes de placentera diversión.


<La mitad del mundo no puede comprender los placeres de la otra mitad.> Jane Austen


Undine von Reinecke ♪


La autora por la Editorial

Fuente: Libros de Seda

Madeline Bell creció en Poughkeepsie, Nueva York, y tiene una maestría en Escritura Creativa por la Universidad de Columbia. Como cualquier heroína de comedia romántica que se precie, es neoyorquina, adorablemente torpe y tiene un trabajo de oficina en el ámbito creativo. Es la primera autora que Libros de Seda publica en su nueva colección Fun Romance; comedias románticas, contemporáneas o históricas, siempre divertidas.



Comentarios

ENTRADAS POPULARES EN LECTURAS DE UNDINE

RESEÑA: CARTA DE UNA DESCONOCIDA, STEFAN ZWEIG

RESEÑA: "El GATOPARDO", GIUSEPPE TOMASI DI LAMPEDUSA

RESEÑA: "EL CASCANUECES Y EL REY DE LOS RATONES", E. T. A. HOFFMANN

RESEÑA: EL BAILE, IRÈNE NÉMIROVSKY

RESEÑA: ORGULLO Y PREJUICIO, JANE AUSTEN